Pasado, presente y futuro de nuestras costumbres, símbolos, música, sociedad, relaciones, personajes, fiestas, comidas, viajes, deportes y mucho más.

Básicamente, lo que representa al ser argentino.

lunes, 30 de agosto de 2010

La desigualdad en Argentina


“Las reglas políticas y económicas podrían dirigirse a moldear un ciudadano de distinto tipo, pero las que hoy rigen castigan las conductas solidarias y pagan las individualistas”, sentencia Roberto Gargarella, especialista en derechos humanos, democracia y filosofía política. La fraternidad es una característica que muchas veces se adjudica el propio argentino. Desastres naturales, epidemias y situaciones de riesgo; son ocasiones en que el país entero se moviliza para ayudar, sin embargo, la solidaridad como una actividad colectiva y cotidiana no es un hábito que se presente de forma masiva.

La desigualdad social, con una brecha que se expande cada vez más, y el contraste que existe entre Capital Federal y el Conurbano bonaerense -así como con el resto de las provincias- ponen en manifiesto a una sociedad fragmentada. La agenda periodística y política no priorizan a las actividades solidarias y su tratamiento es fugaz. “Estamos organizados en un sistema económico y político que se alimenta de egoísmo, rasgo de carácter que toma como combustible básico para permitir que la rueda económica y política se mueva”, justifica Gargarella.

El argentino se proclama solidario y se interesa por las injusticias que suceden, pero muchas veces necesita un impulso para involucrarse. “Argentina abraza a Chile", la torre de "Hambre Cero" propuesta por Red Solidaria y la ayuda humanitaria de Argentina hacia Haití son grandes ejemplos de la iniciativa que puede generar en la sociedad el poder ayudar a los que más lo necesitan.

El 4 de septiembre de 2009, La nación publicó un artículo en el cual “según un grupo de Análisis y Desarrollo Institucional y Social existen 105.000 organizaciones sociales que consiguen un 10 por ciento de su financiamiento a través de donaciones de particulares, empresas y lo que recogen en festivales, rifas y colectas”. La ayuda existe pero el compromiso no está presente con la misma intensidad.
“No nos enojemos con la realidad, trabajemos para cambiarla sin el
recurso facilista de la transferencia de responsabilidades típica del ‘yo no fui’”, dijo Osvaldo Pepe, licenciado en Ciencias Políticas, en “Debates en la cultura argentina 2005-2006”.




Jóvenes que no quieren pobreza






Pájaro, como lo llaman, y Mercedes son una pareja que viven junto a sus hijos en Nicole, un barrio donde el agua está contaminada y las conexiones de luz son muy precarias.

Ambos soñaban con una casa sin goteras en los días de lluvia. Con un piso que no fuera de barro. Y un refugio calentito en el invierno. Parecía imposible hasta que un día hablaron con los chicos de Un techo para mi país.

Ahí comenzó todo un proceso que, aunque fue largo, finalizó con la asignación de la vivienda. Pasaron un fin de semana junto a 10 jóvenes que entre mates y canciones de Dread Mar I, no sólo se levantaron paredes, sino también sueños y esperanzas con las que esa familia comenzará a forjar un futuro mejor.

1000 voluntarios de Un techo para mi país, la Organización No Gubernamental, construyeron 68 viviendas este fin de semana en Ovejero (Escobar), Tierra y Libertad, El triunfo y Nicole (La Matanza). Ya son 1682 casas construidas y aspiran a llegar a los “2010 Techos para el 2010”. La construcción fue posible gracias a 650.000 pesos recaudados en la Gala anual, que la organización realizó el 18 de agosto en el Alvear Palace Hotel.





sábado, 28 de agosto de 2010

Comunicación alterada

La televisión, la radio y la gráfica aparecieron en el país, una tras otra, con el objetivo de informar y entretener a toda la sociedad. De esta manera, la imagen y el sonido llamaron la atención y pasaron a ser elementos de gran utilidad por su propio mérito. De hecho, en el presente sigue siendo común ver a la gente en las calles o en otro lugar aprovechando sus usos y funciones.

Pero lejos quedaron los años en donde se dieron a conocer las tres alternativas de comunicación que parecían suficientes para satisfacer a sus clientes. A partir de 1995 se comenzó a aplicar un servicio que prácticamente era una novedad para todos: el soporte de Internet. Este medio ocupa hoy un lugar imperante en la tecnología y captó en ese momento la atención de los diarios argentinos porque éstos se impusieron con un formato digital, aparte del papel.

“Las razones que tienen las personas cuando eligen informarse por medio de la Web son diversas, una es la gratuidad y la otra es la posibilidad de tener lecturas diversas; contrastar y profundizar la información si se esté interesado en hacerlo”, sostiene Sergio Balardini, psicólogo que se especializa en adolescencia y juventud, y políticas públicas de juventud, con respecto a la utilización de los medios electrónicos.

La tecnología electrónica se renueva sin medida, en el mundo cada vez se genera algo para explorar o adquirir. Balardini considera que “la ventaja de la innovación es que los servicios y funciones que se ofrecen se recambian y así son mejores. Sin embargo, también tiene su desventaja, y es que la renovación constante siempre implica un nuevo esfuerzo de aprendizaje”.

Está comprobado que el ingreso de Internet a la Argentina permitió que el ser humano interactúe constantemente con la realidad. Al mismo tiempo, se sumó a la oferta de las demás fuentes de información. “Todos los medios de comunicación alimentan la concepción que tiene cada persona acerca del mundo”, afirma el psicólogo.

Para tener más información sobre el impacto de Internet en la industria periodística, pueden leer el libro " Digitalizar las noticias", del sociólogo argentino Pablo Boszkowski.

El aguante

Los Borrachos del Tablón, La 12, La Guardia Imperial, Los Funebreros. Al nombrarlas, cualquiera sabe de qué estamos hablando. Es que son parte de nuestro folklore, y su energía se siente con sólo caminar cerca de las canchas más importantes del país. Las hinchadas, con sus canciones y banderas de colores, forman parte del heterogéneo paisaje argentino.

Pero hay que admitir que esto va más allá de lo pintoresco y muchas veces se viven situaciones tensas, difíciles, quizás hasta extremas. La violencia se ha convertido en moneda corriente dentro, y sobre todo fuera, de los estadios del deporte más amado por los argentinos. En abril de este año, Luis Casabal ennumeró para La Nación un racconto de todos los muertos que provocó este flagelo. Desde el 14 de mayo de 1939, con el tiroteo de policías en un partido entre Lanús y Boca, pasando por la tristemente famosa Puerta 12 y los siete decesos de River-San Lorenzo en 1944, la lista asciende a 249. Y gran parte de este número son resultado de enfrentamientos entre barras.

Mónica Nizzardo, fundadora de la Asociación Civil Salvemos al Fútbol, opina: “se necesita una política de Estado para terminar con esto y que la Justicia se comprometa con las investigaciones”. Para eso trabajan desde el 2006, impulsando proyectos y llevando todos los casos que conocen a Tribunales.

Para entender más de qué se trata todo esto, se pueden acercar los jueves al Centro Cultural de la Cooperación y ver el documental de Pablo Tesoriere, Fútbol, Violencia S.A., que se proyecta a las 20.30 en la Sala Raúl González Tuñón.